PINCHAZO EN HERVÁS (1ª PARTE)
Fue una primavera, no me cabe la menor duda; pero no me preguntéis por cuándo. Si hubiese sido hace poco recordaría quizás que no estábamos en Semana Santa, sólo sé que en aquel entonces aún poseía el Renault 12 color rojo burdeos, que su placa de matriculación correspondía a Soria y que mi esposa estaba en “estado de buena esperanza” de la que hoy es Beatriz, mi hija. El caso es que aquella aventura no la olvidaré nunca.
Dos ruedas de repuesto, una lata de aceite, ... (ver texto completo)
Fue una primavera, no me cabe la menor duda; pero no me preguntéis por cuándo. Si hubiese sido hace poco recordaría quizás que no estábamos en Semana Santa, sólo sé que en aquel entonces aún poseía el Renault 12 color rojo burdeos, que su placa de matriculación correspondía a Soria y que mi esposa estaba en “estado de buena esperanza” de la que hoy es Beatriz, mi hija. El caso es que aquella aventura no la olvidaré nunca.
Dos ruedas de repuesto, una lata de aceite, ... (ver texto completo)