AIRE NUEVO
Cada día que llega pretendemos que sea distinto, que nos traiga un aire nuevo y más confortable; distinto al lastre cotidiano de la monotonía. Y, algunas veces, forzamos esos acontecimientos con esporádicas y raras salidas de agenda. Una incursión, una cata a lo que, en previsible, nos parece que aportaría alguna satisfacción nueva en nuestra itinerante manera de llevar la vida hasta donde podemos o nos dejan. Pero… Siempre aparecen peros que ahogan la ilusión y nos vemos avocados a tomarlo con cierta filosofía sanadora para salvaguardarnos de una depresión del ánimo y seguir esperando otra oportunidad, otro día con más aire nuevo. Una ración de ambrosía espiritual que nos ponga en ruta hacia alicientes deseables.
Saludos y que paséis un buen fin de semana.
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