Niño indio, si estás cansado,
tú te acuestas sobre la Tierra,
y lo mismo si estás alegre,
hijo mío, juega con ella...
Se oyen cosas maravillosas
al tambor indio de la Tierra:
se oye el fuego que sube y baja... ! Qué maravilla! Enhorabuena a la persona que lo ha elaborado, tiene unas manos fabulosas.