Ahí está, eso queria saber; resulta que con la intención sana de aprovecharlo todo pues, sin ningún freno, echo mano a cuanto me parece y ¡hala! a reciclar: vino del tinto (porque me lo regaló mi hermano Ángel y sabe a pueblo), peregil y ajo (porque las cocinadas sin estos elementos no las entiendo) Y, partiendo de la base que la cocina se entiende como si tal laboratorio de inventos culinarios fuese, que unas veces gusta y sorprende como otras nos lleva al desastre; no desisto de intentar mezclar... ¡Gracias por tu consejo Marodriguez! Lo de meterlos en el agua después de freirlos no se lo había visto hacer a mi madre (o a lo menos no lo recuerdo) pero tiene su lógica, se puede entender que con el agua se ablanden; cómo ne se me ocurrió antes. Ay la mente, con lo fácil que parece todo cuando un servidor se anima a meterse cocinero; que sepas que me gusta la cocina y es la única manera de poder probar aquellos platos deliciosos que nos ponía mi madre y muy típicos de nuestro pueblo: patatas escabechadas,... hola!
Perdón por la apreciación de puf! no me he dado cuenta del sentido hasta que lo has dicho jajaj! estaban que te c.... jajaj! muy ricos pruebalos. No se como los haces tu pero en mi casa jamás se le ha echado ajo y perejil. Solo los hacemos viudos como dice mi padre (huevos, pan, sal) o ricos echando un poquito de jamón o de chorizo. Para que no te queden como balines tienes que hacerlos con pan en trocitos pequeños y luego mojarlo con el huevo si te queda muy espeso puedes aligerar con leche.... Pedro procura no dejar la masa muy espesa y cuando los frias los pones en un plato con agua despues los incorporas al cocido, potage o patatas que estan riquisimas.
Un saludo. Yo sólo he hecho los altabellacos de cocido (por aprovechar el pan duro) y, a parte de meterle recortes de todo lo que hallaba con necesidad de gastar pronto; le añadía huevos y vino tinto para amasar las migas y que ligara la pasta. En cuanto a especias era generoso con el ajo y el peregil, lo que nunca he conseguido ni parece que lo vaya a conseguir es que me queden, después de cocerlos con los potajes, esa testura tan esponjosa que le salían a los que hacía mi madre (ya lo he intentado varias...