Ahí la tenéis paisanos, ya despojada de joyas y extraña en venturas; es la simpleza de su pasado o lo arcano de su sencillez aquello que nos encanta cuando nos curvamos a beber.
Sabía desde el principio que no hallaría gran cosa pero merecía la pena, tenía que apartar ese frondoso matojo que ocultaba el manantial natural para que alcanzaseis a ver la cruda realidad. Esto que estáis viendo, este remanso del suelo es lo que queda de esa leyenda; el mismo caudal de agua que llena el estanque del francés le pertenece también. Ahí se ha fijado el chorro más grueso de ella, canalizado y chorreante conducto que posibilita dar un...