Barranco para llegar al arroyo de Los Horcos, LAGUNILLA
Tortuoso fue bajar asentando una pierna tullida, tropezando con cantos de piedra y ramas salidas; este barrancoso final para llegar a las aguas cristalinas.
DESDE LA IMAGINACIÓN A LA REALIDAD: LOS HORCOS (3)
Miraba hacia abajo, pero aún no se veían los arroyos, solamente un tumultuoso paisaje de rocas y ramas, arbustos locos que cubrían la próxima caída vertiginosa del terreno. Dudas de peligros por posibles barrancos. Era mejor no fijar atención a lo que estábamos enfrentando. Él me vigilaba y andaba atento a mi mal paso. –No te preocupes que, a mi paso, donde haya que ir se irá. Pero sin prisa ¡eh!- Le rogaba. Seguramente echaba de menos a aquel...