Hola Pedro no sé si has visto esta foto, ahí estamos algunos de la misma quinta, más o menos, pero nos llevaremos un año arriba o un año abajo. ¿Reconoces a alguien? Espero que sí. ¡ME ENCANTAN ESTAS FOTOS! Ojala que los de nuestra quinta pusiera alguna más.
Saludos
Saludos
Hola de nuevo Rosa. He mirado... Tu eres la del extremo izquierdo (con polo de franjas oscuras y llevas gafas). Trás el brazo que tienes apoyado en el suelo está Julia (justo a tu lado). Las otras caras no soy capaz de reconocer, pero podría hecer unas conjeturas con poco acierto. Mejor no me pronuncio. Ya me lo contarás tu.
Sabes, aquí... en Navarra, yo he sido montañero. De esos que hacen travesías, senderismos que te llevan a las más altas cumbres del Pirineo Navarro. Tres años seguidos me condecoraron por haber superado más de los veinte mil metros de altitudes en travesía. Nos ponían una medalla y nos obsequiaban con un regalo muy personal. También, en clave de humor, nos ponían una canción seleccionada que hacía alusión a como te veía el grupo de la federación; a mi... siempre me tocaba la de Orsobuey (no se cómo se escribe pero, "en cristiano"... es así). Te cuento ésto porque viendo que estáis de excursión me vienen a la memoria estas aventuras. Es más: El amiguete que me inició, se reía de mi cuando le contaba que yo subía todos los domingos al monte San Cristobal. Decía: - ¡Eso es un paseo! - ¡estos vasconavarros! "son la leche". Si te digo que San Cristobal tiene ochocientos metros de subida (andando tranquilo dos horas); tu ¿qué pensarías?. Lo grave es... que él tenía razón. Haciamos travesías que nos llevaban todo el día.
La foto ya la había visto entre las muchas que hay colgadas. Me encantan todas. Las hay que le cultivan a uno los conocimientos en botánica, otras que refrescan el alma y, no podían faltar, las que te retraen a los orígenes de tu existencia. Profundos iconos de nuestras vidas.
Gracias a los que habéis hecho posible un álbum tan enriquecedor de fotos.
Y, para tí... un fuerte abrazo.
Sabes, aquí... en Navarra, yo he sido montañero. De esos que hacen travesías, senderismos que te llevan a las más altas cumbres del Pirineo Navarro. Tres años seguidos me condecoraron por haber superado más de los veinte mil metros de altitudes en travesía. Nos ponían una medalla y nos obsequiaban con un regalo muy personal. También, en clave de humor, nos ponían una canción seleccionada que hacía alusión a como te veía el grupo de la federación; a mi... siempre me tocaba la de Orsobuey (no se cómo se escribe pero, "en cristiano"... es así). Te cuento ésto porque viendo que estáis de excursión me vienen a la memoria estas aventuras. Es más: El amiguete que me inició, se reía de mi cuando le contaba que yo subía todos los domingos al monte San Cristobal. Decía: - ¡Eso es un paseo! - ¡estos vasconavarros! "son la leche". Si te digo que San Cristobal tiene ochocientos metros de subida (andando tranquilo dos horas); tu ¿qué pensarías?. Lo grave es... que él tenía razón. Haciamos travesías que nos llevaban todo el día.
La foto ya la había visto entre las muchas que hay colgadas. Me encantan todas. Las hay que le cultivan a uno los conocimientos en botánica, otras que refrescan el alma y, no podían faltar, las que te retraen a los orígenes de tu existencia. Profundos iconos de nuestras vidas.
Gracias a los que habéis hecho posible un álbum tan enriquecedor de fotos.
Y, para tí... un fuerte abrazo.