NO SÉ LA MADEJA QUE SE ESTÁ LIANDO. Os estoy leyendo y, por más vueltas que le doy; no acierto a comprender. Cuando estuve en el pueblo vi obras, vi gente trabajando; vi a lo lejos un campin, casas nuevas, muchas casas que nunca había visto antes. Algo grandioso que se estaba proyectando: carteles, ilusión; muchas espectativas de futuro. Pero hoy... percibo el hundimiento de todo cuanto hube imaginado, al menos la moral de un pueblo que duda de aquello que a votado. Presiento que se exageran cosas, que se pretende apagar la esperanza de una mayoría que en su día creyó acertado un proyecto de un equipo de gentes que ha votado. Apenas han pasado las elecciones y se habla más de cosas que interesan y se refutan promesas a destiempo, ahora que toda decisión ya se ha tomado. Esas voces hay que darlas en su oportuno momento, antes que las llamas arrasen; de qué sirven ahora, cuando hay que afrontar el hecho; sea o no sea un desastre.
A todo mi pueblo querido: os deseo lo mejor. No os dejéis hundir nunca por las adversidades y luchad por vuestro futuro.
Desde aquí os mando todo mi apoyo.
Pedro.
A todo mi pueblo querido: os deseo lo mejor. No os dejéis hundir nunca por las adversidades y luchad por vuestro futuro.
Desde aquí os mando todo mi apoyo.
Pedro.
Pedro es lo que tu decias las derrotas son muy duras de encajar, pero cuando pase un poquito mas de tiempo, todo se olvida, ademas presiento que este mal momento que vive España va a cambiar para bien.
Sabeis que me gustaria? que las puertas de las casas, pudieran estar abiertas, que las pandillas de amigos, fueran tan sanos como fueron los de mi pandilla.
en lo de "sanos" no me refiero a salud, sino a la buena gente que eran.
Sabeis que me gustaria? que las puertas de las casas, pudieran estar abiertas, que las pandillas de amigos, fueran tan sanos como fueron los de mi pandilla.
en lo de "sanos" no me refiero a salud, sino a la buena gente que eran.
Aún quedan amigos así (sanos) pero no muchos. Las cosas han de cambiar, es el éxodo ineludible de toda naturaleza; acomodarse a las circunstancias. Lo que más ahoga son los contínuos giros de postura para encajar en los novedosos moldes sociales y económicos por ser tan inestables como los de ahora. Cuando se ha viajado en una línea de vida marcada por una seguridad estable, sin sofocones ni recortes de caprichos y no se han llegado a considerar las realidades con sinceridad, admitiendo que los bienes son limitados y que, si no hay equidad en su reparto, algunos se quedan sin nada; es normal que el ser humano se despeche y explote en cólera. La realidad del esfuerzo y la dureza que nos exige la supervivencia, cuando los años de bonanza se prolongan hasta la saciedad, llegan a olvidarse. Y caemos en el error de pensar que los demás están obligados a traernos el pan a la boca, cuando es nuestro ingenio particular el que debe alimentarnos y, en el mejor de los casos ayudar a que otros, arrimando el hombro, también se favorezcan. Es la cruda realidad de la vida. Vivir, para mi; es afrontar el reto, la lucha de cada día por ver un nuevo sol.
Un abrazo a todos y, en especial a esos amigos... a esa gente Mily.
Pedro
Un abrazo a todos y, en especial a esos amigos... a esa gente Mily.
Pedro