LAGARTO LAGARTO
Cómo luchar contra las plagas que afectan a nuestros cultivos.
Cuando pensamos en las plagas de los cultivos y la manera de evitar los daños que escarabajos, orugas, gusanos, babosas, topillos y demás seres nos producen, a la mayoría de los agricultores se nos viene a la cabeza el pasarnos por la tienda de fitosanitarios y comprar algún producto que nos sea útil.
En realidad, también podemos pensar que en nuestras tierras existen seres vivos que pueden ayudarnos, y de una manera gratuita. Este es el caso de los conocidos lagartos, sobre todo del LAGARTO OCELADO, un reptil que a muchas personas repugna y que tiene unos hábitos alimenticios que pueden hacer las delicias de cualquier buen agricultor o jardinero.
DESCRIPCIÓN
El lagarto ocelado, Lacerta lepida de nombre científico, es el mayor de los lagartos españoles, puede medir desde el hocico hasta el inicio de la cola unos 20 centímetros, su coloración dorsal es amarillenta o verdosa con figuras poligonales oscuras o negras, en los costados tiene unas manchas u ocelos azules, bordeados de negro, que son los que le dan el nombre.
En Avila existe otro lagarto, el lagarto verdinegro, que habita en las zonas de montaña de la provincia. Es más pequeño y con una coloración muy llamativa.
ALIMENTACIÓN
En su dieta destacan los conocidos escarabajos, saltamontes, mariposas, orugas y en menor medida comen ratones y topillos, sobre todo las crías, por que no olvidemos que el lagarto es capaz de entrar en las madrigueras de los topillos y dar buena cuenta de lo que allí encuentra.
Con hacer una simple cuenta nos podemos imaginar la de insectos que pueden acabar en sus estómagos, y sin pagar un euro.
Algunos con un pelín de mala intención achacan a los lagartos la muerte de perdices, codornices, sus huevos y la de los gazapos de conejos y liebres. Esto en ocasiones es cierto ya que el lagarto ocelado come todo aquel animal que le entre por su boca y que se deje capturar, pero según los estudios que se han hecho de estómagos de lagartos se ha llegado a la conclusión que en su dieta casi no entran estos animales siendo sus principales piezas los insectos.
HÁBITOS Y COSTUMBRES
Un lagarto está activo desde los meses de Marzo-Abril hasta octubre, época en la que los topillos se multiplican más, las orugas y escarabajos empiezan a hacer de las suyas y la mayoría de los insectos están activos y se reproducen.
Las hembras ponen entre 6 y 20 huevos al año, que entierran con sus patas delanteras en el suelo, a los tres meses darán su fruto, con lo que en poco tiempo podremos tener en una ha. de cultivo una población de Lagartos aceptable para nuestros fines agrarios.
Animales territoriales, no soportan a ningún otro lagarto en su territorio, más que a las hembras, a las cuales persiguen insistentemente durante el celo hasta que las sujetan a mordiscos en la base de la cola y en los costados.
Existen también creencias, en algunos pueblos, que atribuyen a los lagartos la manía de subírseles a las mujeres por las piernas, hecho que provocaba en algunos lugares que a la hora de trabajar en el campo se ataran bien las faldas, por lo que pudiera pasar. La verdad es que no conozco a nadie que le haya sucedido semejante hecho, pero se dice...
Cómo luchar contra las plagas que afectan a nuestros cultivos.
Cuando pensamos en las plagas de los cultivos y la manera de evitar los daños que escarabajos, orugas, gusanos, babosas, topillos y demás seres nos producen, a la mayoría de los agricultores se nos viene a la cabeza el pasarnos por la tienda de fitosanitarios y comprar algún producto que nos sea útil.
En realidad, también podemos pensar que en nuestras tierras existen seres vivos que pueden ayudarnos, y de una manera gratuita. Este es el caso de los conocidos lagartos, sobre todo del LAGARTO OCELADO, un reptil que a muchas personas repugna y que tiene unos hábitos alimenticios que pueden hacer las delicias de cualquier buen agricultor o jardinero.
DESCRIPCIÓN
El lagarto ocelado, Lacerta lepida de nombre científico, es el mayor de los lagartos españoles, puede medir desde el hocico hasta el inicio de la cola unos 20 centímetros, su coloración dorsal es amarillenta o verdosa con figuras poligonales oscuras o negras, en los costados tiene unas manchas u ocelos azules, bordeados de negro, que son los que le dan el nombre.
En Avila existe otro lagarto, el lagarto verdinegro, que habita en las zonas de montaña de la provincia. Es más pequeño y con una coloración muy llamativa.
ALIMENTACIÓN
En su dieta destacan los conocidos escarabajos, saltamontes, mariposas, orugas y en menor medida comen ratones y topillos, sobre todo las crías, por que no olvidemos que el lagarto es capaz de entrar en las madrigueras de los topillos y dar buena cuenta de lo que allí encuentra.
Con hacer una simple cuenta nos podemos imaginar la de insectos que pueden acabar en sus estómagos, y sin pagar un euro.
Algunos con un pelín de mala intención achacan a los lagartos la muerte de perdices, codornices, sus huevos y la de los gazapos de conejos y liebres. Esto en ocasiones es cierto ya que el lagarto ocelado come todo aquel animal que le entre por su boca y que se deje capturar, pero según los estudios que se han hecho de estómagos de lagartos se ha llegado a la conclusión que en su dieta casi no entran estos animales siendo sus principales piezas los insectos.
HÁBITOS Y COSTUMBRES
Un lagarto está activo desde los meses de Marzo-Abril hasta octubre, época en la que los topillos se multiplican más, las orugas y escarabajos empiezan a hacer de las suyas y la mayoría de los insectos están activos y se reproducen.
Las hembras ponen entre 6 y 20 huevos al año, que entierran con sus patas delanteras en el suelo, a los tres meses darán su fruto, con lo que en poco tiempo podremos tener en una ha. de cultivo una población de Lagartos aceptable para nuestros fines agrarios.
Animales territoriales, no soportan a ningún otro lagarto en su territorio, más que a las hembras, a las cuales persiguen insistentemente durante el celo hasta que las sujetan a mordiscos en la base de la cola y en los costados.
Existen también creencias, en algunos pueblos, que atribuyen a los lagartos la manía de subírseles a las mujeres por las piernas, hecho que provocaba en algunos lugares que a la hora de trabajar en el campo se ataran bien las faldas, por lo que pudiera pasar. La verdad es que no conozco a nadie que le haya sucedido semejante hecho, pero se dice...