Un tema que puede sumar voces, un aliento que a todos llega; porque si hay un pais refranero, el nuestro siempre será el primero (una de mis quijotadas) jeeje.
Yo siempre acostumbro a pensar en los peligros que nos acechan y entre reflexiones invoco a nuestro Dios del cIelo:
"Que Dios me proteja de las aguas mansas
que a las bravas ya las veo yo venir".
Está claro: en la mansedumbre aparente de algunos perfiles humanos se esconden graves y peligrosos despechos difíciles de presentir y mantenerse a salvo de ellos. Mientras que el carácter violento y exteriorizado nos previene de lo que es obvio.
Yo, personalmente, opino que en muchos de los casos sucede como aquel otro que todos ustedes conocen: "PERRO LADRADOR, POCO MORDEDOR"; pero es muy cierto que nos vemos sorprendidos muchas veces por la conducta de personas por las que jamás hubiesemos apostado verla en una situación tan contraria a sus principios aparentes. Nuestro cerebro, en un momento crítico, también nos puede jugar malas pasadas.
En fin, no me extiendo más.
Un saludo
Yo siempre acostumbro a pensar en los peligros que nos acechan y entre reflexiones invoco a nuestro Dios del cIelo:
"Que Dios me proteja de las aguas mansas
que a las bravas ya las veo yo venir".
Está claro: en la mansedumbre aparente de algunos perfiles humanos se esconden graves y peligrosos despechos difíciles de presentir y mantenerse a salvo de ellos. Mientras que el carácter violento y exteriorizado nos previene de lo que es obvio.
Yo, personalmente, opino que en muchos de los casos sucede como aquel otro que todos ustedes conocen: "PERRO LADRADOR, POCO MORDEDOR"; pero es muy cierto que nos vemos sorprendidos muchas veces por la conducta de personas por las que jamás hubiesemos apostado verla en una situación tan contraria a sus principios aparentes. Nuestro cerebro, en un momento crítico, también nos puede jugar malas pasadas.
En fin, no me extiendo más.
Un saludo