La última vez que estuve en fiestas de Lagunilla ya hacían en el Vallejo actos equinos que nos maravillaban. Aquella vez, vi a un señor que nos mostraba habilidades con un vigoroso caballo tordo; el animal se movía al son de una dulce armonía de flamencas guitarras. Luego saludaba y se erguía sobre sus traseras patas, dando muestra de ecuestre y vella noble estampa.
Saludos, hoy repongo fuerzas para el fin de semana. Parece que estéis de vacaciones... muscho silencio presenta el foro.
Ya pronto será la Asunción y se llenará el pueblo de gente y... ¿Quién sabe si me deje caer por allá? Por aquí está mi hermano "el baila" que me ha traido saludos de allá. A esas personas les devuelvo el mismo y les agradezco el gesto, me han aportado bastante felicidad. ¡Gracias!
Pedro G. G.
Saludos, hoy repongo fuerzas para el fin de semana. Parece que estéis de vacaciones... muscho silencio presenta el foro.
Ya pronto será la Asunción y se llenará el pueblo de gente y... ¿Quién sabe si me deje caer por allá? Por aquí está mi hermano "el baila" que me ha traido saludos de allá. A esas personas les devuelvo el mismo y les agradezco el gesto, me han aportado bastante felicidad. ¡Gracias!
Pedro G. G.
HOLA pEDRO... MIRÀ SE ME HAN PERDIDO LOS LENTES POR LO TANTO DISCULPA SI NO ESCRIBO LO MEJOR POSIBLE. PRIMERO ES GENIAL SABER QUE ESTÀS EN EL FORO QUE AUQNE PASEN LOS DIAS TE VAMOS A ENCONTRAR. eSO CUBRE Y REPARA A LOS QUE LES GUSTA COMO A MI LA PERMANENCIA EN LO COTIDIANO. cON RESPECTO A LAS FIESTAS DE TOROS DEL PUEBLO RECUERDO LAS CAPEAS.. ASI SE LLAMABAN Y LA GENTE DEBAJO DE LOS CARROS... ERA MUY CHICA Y ME DABAN MIEDO. TAMBIÈN RECUERDO LOS BALCONES QUE RODEABAN LA PLAZA Y QUE YO ENVIDIABA PORQUE ME PARECÌAN LUGARES MAS SEGUROS.. DESDE ENTONCES ADMIRO LAS CORRIDAS COMO FIESTA NACIONAL PERO... EN FIN SON IMPRESIONES DE LA INFANCIA... AHORA ME DIVERTIRÌAN MUCHO.,..
Hola Ana, me alegro que te hayas vuelto a animar a escribirnos algo a pesar de las dificultades que encuentras. Lo de los balcones, no te creas eso de que son seguros, a mi hermana Urbana se le vino abajo en una de esas capeas, y fue sonada aquella anécdota. Vivia en la parte derecha de la Plaza Mayor, al fondo del final de la cuesta, ya tomando la salida de una calle que sale para juntarse con la que da acceso a la iglesia. Al otro lada había un extrecho pasaje que moría enfrente de la iglesia.