LAGUNILLA: Comer y beber y tambièn lo que sigue.. porque para...

A ver Pedro, que te lo estan pasando, bueno glorioso ¡para no irritar con mis interpretaciones... que entre el vermu, las picadas, los aceites, los vinitos, las paseitos, los encuentros desencotraos y la mar en coche de Lagunilla vas a volver a tus trajines me parece que que con unos kilitos de mas. Pero arriba compañero, no dejes para mañana lo que puedas disfrutar hoy y sigue contando tus variadas crònicas del pueblo... que me siento contigo y la gente a disfrutar.. hasta luego.....

Eso me temo amiga, a mi las tripillas me pierden; ya se dice por pamplona que la vida son tres placeres: comer, beber y j... (no me atrevo a definir el último). Hay pudores insuperables. Pero a lo dicho que "de la panza viene la danza" y "con pan y buen vino se hace ameno el camino". Me alegra mucho encontrar siempre algún comentario en el foro, eso hace que se rompa el monótono seguimiento de registros que ofrece con pedantería siempre mi nombre ymi nombre. Yo, aunque os cueste creerlo, disfruto mucho más leyendoos que escribiendoos y, lo que más me preocupa, es que se me acaben los argumentos porque luego no sabré de donde tirar para invitaros a seguir entrando al foro con comentarios o temas que nos sigan manteniendo activos.

Muchas gracias por todo.

Comer y beber y tambièn lo que sigue.. porque para el hambre no hay duro por eso de.. agua que no has de beber dejala correr y que te den las doce asomado a la ventana, cara de puchero roto no digas por la mañana que no te rondan los mozos...
bueh, bueh, son licencias que una se toma.. porque una cosa trae la otra y asi es si no estas en el Foro. No existes ¡Mily que te estas riendo a carcajadas.. y tu Pedro diciendo.. pero què insòlita esta mujer.... ¡
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Ana María, que me encantan los puntos suspensivos y lo qwue dejas translucir con lo de cara de puchero, suena a una copla que, seguro no pase de moda. Me ha venido a la memoria un chiste que me contó mi esposa:

Era una muchacha muy, pero que muy requete fea y, lamentablemente paraplégica; pero tenía un cabello precioso. Su madre se lo peinaba y le procuraba animar a salir de paseo pero ella, como no se veía con alicientes de recompensa de tal esfuerzo, negaba la sugerencia con rotundos gestos.
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