EL PORTAL DE BELEN
Mi portal, sobre una humilde mesa y arrinconado, muestra antiguas piezas de otros años. Una repetición continuada de elementos usados, acopio de útiles para mermar los gastos. Y, la cascada moderna, fue lo último que un día compramos. Este es el año del “consumismo”. Todo el mundo en crisis: con su mismo traje, su mismo coche; con sus mismos reyes y pastores, con su mismo borrico y su buey. Y majestuosos los monarcas de oriente que visitan a su mismo Dios que, con San José y María comparten todo consumismo de amor.
Las luces se han fundido y ello entristece un montón, la única iluminaria, la muestra en su cara El señor. Es la luz de nueva vida que sólo cabe en mi imaginación. Una esperanza sobre el futuro que nos aguarda y que hoy nos brinda su amor. Para que no nos flaquee la esperanza ni mucho menos la fe, viene la navidad cada año; nos trae señales de El.
En mi portal ha vuelto la esperanza, la ilusión; la luz de un nuevo día, un gran potencial de amor.
¡FELIZ NAVIDAD!
Pedro González Gallardo. (Para todos aquellos que me habéis seguido animando y, sobre todo para los más incondicionales: Miguel, Manchega, Mily, JSM, JSB, Ana María, Marodriguez, J. González, Rubiaca, Charo, Jara, Rosa, Tino, Cholo, último Templario, AG y, seguramente un montón más; a todos los nombrados y los que no (porque mi memoria me ha jugado una mala pasada) aunque más de uno ya lo tengo en mi correo personal; desde Pamplona os deseo una gran Navidad y este cordial abrazo de palabras para mis más queridos amigos.
Mi portal, sobre una humilde mesa y arrinconado, muestra antiguas piezas de otros años. Una repetición continuada de elementos usados, acopio de útiles para mermar los gastos. Y, la cascada moderna, fue lo último que un día compramos. Este es el año del “consumismo”. Todo el mundo en crisis: con su mismo traje, su mismo coche; con sus mismos reyes y pastores, con su mismo borrico y su buey. Y majestuosos los monarcas de oriente que visitan a su mismo Dios que, con San José y María comparten todo consumismo de amor.
Las luces se han fundido y ello entristece un montón, la única iluminaria, la muestra en su cara El señor. Es la luz de nueva vida que sólo cabe en mi imaginación. Una esperanza sobre el futuro que nos aguarda y que hoy nos brinda su amor. Para que no nos flaquee la esperanza ni mucho menos la fe, viene la navidad cada año; nos trae señales de El.
En mi portal ha vuelto la esperanza, la ilusión; la luz de un nuevo día, un gran potencial de amor.
¡FELIZ NAVIDAD!
Pedro González Gallardo. (Para todos aquellos que me habéis seguido animando y, sobre todo para los más incondicionales: Miguel, Manchega, Mily, JSM, JSB, Ana María, Marodriguez, J. González, Rubiaca, Charo, Jara, Rosa, Tino, Cholo, último Templario, AG y, seguramente un montón más; a todos los nombrados y los que no (porque mi memoria me ha jugado una mala pasada) aunque más de uno ya lo tengo en mi correo personal; desde Pamplona os deseo una gran Navidad y este cordial abrazo de palabras para mis más queridos amigos.