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LAGUNILLA: ENTRE EL CIELO Y LA TIERRA...

ENTRE EL CIELO Y LA TIERRA

Nos remitimos a las enseñanzas que nos conviene, aquellas que, siendo oportunas nos favorecen. Oiremos y atenderemos a capricho, lo guardaremos hasta que en nuestro ir y venir por la vida nos brinde la apertura y acaezca el espacio para usar esa fórmula que nos aporta un halo de distinción y, el estigma de la vanidad arrogante, nos hará un guiño. Son los espacios inéditos aquellos intereses que se añoran desde el visceral intelecto, se estima en alto grado llenarlo de nuevos conocimientos. Entre el cielo y la tierra está el yugo de las yuntas que ararán mi huerto.

Pedro G. G. les desea un feliz 1º de mayo.