Curiosidades de otro tiempo
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Solía ser una costumbre bastante general en el concierto de matrimonios el que fueran los padres los que los concertaran sin contar para nada con los contrayentes. Como tal manera de proceder en cosa de tal importancia es en parte atentatoria a la libertad que el matrimonio requiere y pudiera ser origen de muchos disgustos y demás, fueron varias las disposiciones que contra esto se dieron, entre otras una del Sr. Obispo Porras, en 1693, prohibiendo bajo pena de excomunión que los padres concertaran matrimonios sin contar con sus hijos. Con tales providencias debió de cortarse el abuso, por cuanto en lo sucesivo no vuelve ha hablarse de ello.
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Solía ser una costumbre bastante general en el concierto de matrimonios el que fueran los padres los que los concertaran sin contar para nada con los contrayentes. Como tal manera de proceder en cosa de tal importancia es en parte atentatoria a la libertad que el matrimonio requiere y pudiera ser origen de muchos disgustos y demás, fueron varias las disposiciones que contra esto se dieron, entre otras una del Sr. Obispo Porras, en 1693, prohibiendo bajo pena de excomunión que los padres concertaran matrimonios sin contar con sus hijos. Con tales providencias debió de cortarse el abuso, por cuanto en lo sucesivo no vuelve ha hablarse de ello.