Detrás de esa curva vienen otras y algunas más que se acercan al pueblo cobrando la mente ilusión. Deja que acompañe el castaño y los rebollos; la jara y esos helechos salpicados de escobas en la memoria del recorrido; que vuele el horizonte entre la sierra perseguido por la añoranza de sus canchales o fuentes entre vetustas casas acogido. Permite que sueñe despierto el trazado, serpenteante de este hermoso rincón de vida que hoy has elegido.
Que pasen un buen fin de semana.
Que pasen un buen fin de semana.