APOYO
Es maravilloso sentirse apoyado cuando nuestros proyectos carecen de comprensión. Cuando las bases que presentamos no llegan a calar en la inmensa mayoría de aquellos que, algún día, se podrán beneficiar de ello. Sucede más a menudo de lo deseable. No siempre recibimos la solidaridad que esperamos pero, cuando pasa el tiempo y comienzan a florecer los resultados, nos rodeamos de las palmaditas en la espalda de aquellas dudosas mentes. Está bien poder sentarse en los poyos que, a pesar de nuestras dudas, nos han llegado a complacer una vez situados. Dudar y rectificar siempre fue un distintivo del que ha sido sabio.
Es maravilloso sentirse apoyado cuando nuestros proyectos carecen de comprensión. Cuando las bases que presentamos no llegan a calar en la inmensa mayoría de aquellos que, algún día, se podrán beneficiar de ello. Sucede más a menudo de lo deseable. No siempre recibimos la solidaridad que esperamos pero, cuando pasa el tiempo y comienzan a florecer los resultados, nos rodeamos de las palmaditas en la espalda de aquellas dudosas mentes. Está bien poder sentarse en los poyos que, a pesar de nuestras dudas, nos han llegado a complacer una vez situados. Dudar y rectificar siempre fue un distintivo del que ha sido sabio.