Para empezar te diré, mi anonimato es el equivalente al tuyo. Podría denominarme, pedrosillo, lumbreras, cualquiera, sería lo mismo.
Pero voy a lo que quiero decir. Tu contestación a mi comentario lo has querido disfrazar, no es verdad que el chiste hiriera mi sensibilidad, ni tampoco, que me refiriera al cortacésped. Te explico. Me pareció clasista aludir a la profesión de un padre (de otro, claro! no del tuyo) por lo demás, no tengo ninguna objeción a que cuentes los chistes que quieras. Pero añadir temas ajenos, como la guerra, animales y otras nimieses para tratar de hacer recaer un determinado carácter sobre el interlocutor, me parece bobo. No creas! No serás el único que no volverá a contestar comentarios absurdos. J. M.
... (ver texto completo)