Me merece todo el respeto del mundo pues a su sombra me crié, jugué al escondite y aprendí a leer los nombres troquelados en el blanco marmol de los que tuvieron la mala suerte de vivir aquellos tristes años. Por si fuera poco, a escasos metros descansan mis padres. Alfredo García Vicente (Catedrático de Física y Química del y.E.S. "Fray Luis de León" de Salamanca).