Hola Antonio:
Sí que es casualidad, aunque al llevar tu tatarabuelo los apellidos al revés que los de mi abuelo, me voy más pòr la casualidad que por otra cosa. No obstante si tu tatarabuelo o alguno de sus descendientes cambió de lugar de residencia abandonando Arenas de
San Pedro para marchar hacia tierras peñarandinas, la casualidad podría dejar de serlo.