POVEDA DE LAS CINTAS: "ANNUNTIO VOBIS GAUDIUM MAGNUM; HABEMUS PA PAN"....

"ANNUNTIO VOBIS GAUDIUM MAGNUM; HABEMUS PA PAN".

Desde el borde mismo de la memoria contrapeso lo que somos y lo que fuimos, y no sabría decir a ciencia cierta si valió la pena tanta lucha para regresar de nuevo a el punto de partida.
Cierto es que en esta ocasión, y por el momento, "pa' pan, habemus". Pero como ya sabrán todos ustedes, la hora del cambio ha llegado.
Comienzan desde este momento los verdaderos recortes que nos impone la especulación de los mercados y la política de la UE; hasta el punto, que darán a el traste con los servicios y mejoras sociales que con sudor, lagrimas, y en ocasiones la sangre de algún aguerrido españolito, logró la sociedad española en su incansable lucha por humanizarse.
Con palabras no carentes de interesada astucia nos han hecho creer que los recortes son necesarios, que la crisis, tienen que pagarla los que nada han tenido que ganar en ella, y que la vida seguirá siendo tal y como siempre fuera: Los ricos cada vez más ricos, y los pobres cada vez más y más pobres.
Es una situación tan extravagante y tan asquerosamente desvergonzada, que aquellos que provocaron la crisis sean los mismos que utilizan su botín en comprar yates de lujo, joyas, coches de alta gama, casas de lujo en Londres, y aunque sus aportaciones a la sociedad sean prácticamente nulas, ganen mucho más dinero que antes de comenzar la crisis, que dan ganas de pensar que no puede estar pasando.
Mientras, millones de resignados inocentes asumimos sumisamente los recortes impuestos por los políticos siervos del capital como algo "necesario", como la panacea que aliviará cada uno de nuestros males, aun a sabiendas de que nuestra única salida a esta enfermedad es la de acabar con las mafias que controlan el dinero mientras nos quede gasolina.
La crisis que hoy vivimos es una escusa para poner a el trabajador donde siempre estuvo, con respecto a los privilegiados poderosos.
Espero que esta vez les salga el tiro por la culata, que de una vez por todas la sociedad española alcance la mayoría de edad, pueda emanciparse, decidir por si misma el modo en el que quiere vivir y morir, y entender de una vez por todas, sin competencias y materialismo, el verdadero sentido de la vida y por lo que realmente vale la pena luchar.