LA INCONTINENCIA VERBAL DE QUIENES SE CREEN Y ACTÚAN COMO SI FUERAN LOS DUEÑOS ABSOLUTOS DE ESTA PÁGINA OCUPANDO LA PRÁCTICA TOTALIDAD DE LO MISMA CON TEMAS QUE EN ABSOLUTO TIENEN NADA QUE VER CON LA VIDA LOCAL DE LA LOCALIDAD A CUYA TITULARIDAD CREEMOS LE CORRESPONDE, DE FACTO LO ESTÁN CONSIGUIENDO IMPUNEMENTE.
1) El inoportuno proceso gripal que he padecido durante estos días, unido al de las escasas ganas de tener que salir a replicar vejaciones y descalificaciones gratuitas que me han sido adjudicadas por un sólo individuo dañando una vez más los más íntimos sentimientos, situación ésta que me me obliga a tomar la desagradable determinación de tener que salir a defenderme contra semejantes osadías desvergonzadas, tanto más desagradables por cuanto jamás tuve que hacerlo a lo largo de toda una vida profesional y social de más de cincuenta años de existencia llevada a cabo con la dignidad profesional y social requeridas, cuyo reconocimiento ha sido igualmente otorgado y avalado oficialmente por los Organismos Públicos y Entidades Sociales pertinentes que así lo acreditan con actos y documentos previstos en la Ley, sobrado es decir que en este caso me liberan de más explicaciones. El hecho de que en mi propio pueblo de escasos 300 habitantes, haya uno sólo, no ya que lo niegue, cuestión que podría traerme al pairo, sino que asocie tales méritos a costa de haberme prostituido poniendo el culo a contribución para conseguirlo, y para más inri, dejándolo escrito en una página publica como la presente, desde ahora mismo le digo que, desde la Constitución Española, hasta el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal en vigor, contienen las disposiciones judiciales necesarias en vigor para defender de calumnias a los ciudadanos que sufren estos atropellos.
1) El inoportuno proceso gripal que he padecido durante estos días, unido al de las escasas ganas de tener que salir a replicar vejaciones y descalificaciones gratuitas que me han sido adjudicadas por un sólo individuo dañando una vez más los más íntimos sentimientos, situación ésta que me me obliga a tomar la desagradable determinación de tener que salir a defenderme contra semejantes osadías desvergonzadas, tanto más desagradables por cuanto jamás tuve que hacerlo a lo largo de toda una vida profesional y social de más de cincuenta años de existencia llevada a cabo con la dignidad profesional y social requeridas, cuyo reconocimiento ha sido igualmente otorgado y avalado oficialmente por los Organismos Públicos y Entidades Sociales pertinentes que así lo acreditan con actos y documentos previstos en la Ley, sobrado es decir que en este caso me liberan de más explicaciones. El hecho de que en mi propio pueblo de escasos 300 habitantes, haya uno sólo, no ya que lo niegue, cuestión que podría traerme al pairo, sino que asocie tales méritos a costa de haberme prostituido poniendo el culo a contribución para conseguirlo, y para más inri, dejándolo escrito en una página publica como la presente, desde ahora mismo le digo que, desde la Constitución Española, hasta el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal en vigor, contienen las disposiciones judiciales necesarias en vigor para defender de calumnias a los ciudadanos que sufren estos atropellos.
Totalmente de acuerdo, Fermín. ¿Quienes son estos tios que nos hablan de sus tatatarabuelos y sus historias? Yo quiero que me cuenten cosas de mi pueblo y para mi los mejores son Adrián y Fermín. Hasta pronto. Gonzalo.