POVEDA DE LAS CINTAS: ¡UNA SENSACIÓN QUE JAMÁS SE OLVIDA!....

¡UNA SENSACIÓN QUE JAMÁS SE OLVIDA!.

Tras haber transcurrido más de medio siglo, ayer, día 5 de agosto de 2017, me cupo el honor de asistir a la Misa Mayor celebrada solemnemente en la Iglesia parroquial de mi pueblo, Poveda de las Cintas, con motivo de la celebración de su Patrona cuya conmemoración se lleva a cabo bajo la advocación de Virgen del Castillo. La serie de sensaciones que me embargaron tras haber contemplado, entre otras, la de haberla oído estando al lado de la pila bautismal en la cual me cristianaron, excuso señalar una a una la serie de todas las demás, y no menos singularidad de cómo han variado los ritos en el transcurso de los años para la referida celebración, circunstancia ésta que me permito señalar por cuanto, no en balde yo también "oficié" de monaguillo en su día y hasta se nos permitía, entonces, contestar en latín en unión del Sacristán, entre otras respuestas, con el clásico "Amén" de rigor.

Al final de la misma, vino la procesión por las calles del pueblo con acompañamiento musical, tan religioso y variopinto como el de aquellos años y en particular con el de la jota en honor de la Patrona, recorrido que no ha variado un ápice en cuanto al itinerario callejero y la asistencia de feligreses, ni tampoco su remate con el mismo acompañamiento dulzainero del himno nacional al término de la misma, a la puerta de la Iglesia finalizada ya la procesión, sensación toda ella que rememora los mismos recuerdos de niño y las mismas notas musicales que desde hace más de tres siglos continúan vigentes en esta España nuestra.

¡Feliz Fiesta Patronal, paisanos/as!.