POVEDA DE LAS CINTAS: ¡DECÍAMOS AYER CLARO Y BIEN, QUE EN CUESTIÓN DE SANA...

¡DECÍAMOS AYER CLARO Y BIEN, QUE EN CUESTIÓN DE SANA ALEGRÍA, NADIE A POVEDA TACHARÍA, QUE INCUMPLIERA SU FIEL PAPEL:

¡Pero ha ocurrido después, que aquel quinquenio de armonía, ha transformado en apatía lo que antes fuera vergel!. ¿Qué ha podido aquí suceder, para que aquella sana alegría, presto murió entristecida olvidando su fiel papel, y enterrando a su vez la povedanía que aquí se dio a conocer!. Pero no hemos olvidado también, a aquél que en su su letanía, proclamó que él no era Gardel, pero sí fiel a su povedanía. Y yo mismo lo confesé:

"Humildemente reconozco que carezco de imaginación para comentar cualquier disertación dirigida a los paisanos de mi pueblo con algo que pueda compararse a ese deslumbrante reclamo de "Povedanos míos queridos". Y es que,! quién fuera Gardel para saber expresarnos como él!. Buen preludio y buen comienzo, quien con celestial incienso e introito clerical, rompe moldes de cristal y advierte a sus adversarios, que entrar a golpe de incensario, es el mejor relicario, de cómo has de predicar".

¡Buenas noches, paisanos!.