ENTRE CUATRO PAREDES
El viento se oye gemir
en la soledad del campo,
solo quedan por allí
grandes suspiros y llantos.
Silencio de soledades
lamentos de camposanto,
las paletadas de tierra
se confunden con el llanto.
Sin rezar un padre nuestro
nadie se quiere marchar,
por las almas olvidadas
que habitan ese lugar
Esa paz que reina allí
por ser un lugar sagrado,
donde dejamos por siempre
a nuestros seres amados.
Al salir por esa puerta
que cuatro paredes cierran,
echando la vista atrás
nuestros pensamientos vuelan.
Unos, vuelan al recuerdo,
otros, a las añoranzas,
y otros se quedan perdidos
igual que las esperanzas.
Aunque cualquier día es bueno
para ir a visitarlos,
hoy día de los difuntos
es el día señalado.
De flores y visitantes
los cementerios se llenan,
y mirando a cualquier parte
solo ves rostros con pena.
Se limpian nichos y tumbas
recordando al ser querido,
a algunas, nadie se acerca,
son las tumbas del olvido.
Son los seres olvidados
de los que nadie se acuerda,
y sus tumbas sin cuidados
rotas, o llenas de hierba.
A mí me causan tristeza
se me encoge el corazón,
Y rezo por todos ellos
una sencilla oración
Pa. Sa. Ma.
El viento se oye gemir
en la soledad del campo,
solo quedan por allí
grandes suspiros y llantos.
Silencio de soledades
lamentos de camposanto,
las paletadas de tierra
se confunden con el llanto.
Sin rezar un padre nuestro
nadie se quiere marchar,
por las almas olvidadas
que habitan ese lugar
Esa paz que reina allí
por ser un lugar sagrado,
donde dejamos por siempre
a nuestros seres amados.
Al salir por esa puerta
que cuatro paredes cierran,
echando la vista atrás
nuestros pensamientos vuelan.
Unos, vuelan al recuerdo,
otros, a las añoranzas,
y otros se quedan perdidos
igual que las esperanzas.
Aunque cualquier día es bueno
para ir a visitarlos,
hoy día de los difuntos
es el día señalado.
De flores y visitantes
los cementerios se llenan,
y mirando a cualquier parte
solo ves rostros con pena.
Se limpian nichos y tumbas
recordando al ser querido,
a algunas, nadie se acerca,
son las tumbas del olvido.
Son los seres olvidados
de los que nadie se acuerda,
y sus tumbas sin cuidados
rotas, o llenas de hierba.
A mí me causan tristeza
se me encoge el corazón,
Y rezo por todos ellos
una sencilla oración
Pa. Sa. Ma.