Historia de los rosales
Los antepasados de nuestros rosales son otros rosales salvajes muy diferentes unos de otros, formando distintas especies, con orígenes en diferentes países del hemisferio Norte. Pero a través de un proceso de selección y de continuas hibridaciones se están consiguiendo continuamente más y mejores variedades que destacan por la originalidad de sus coloridos, por la profusión y duración de su floración y por su resistencia a plagas o enfermedades; todo ello para orgullo de sus padres y para disfrute de quienes los que los cultivan.
Las diferentes variedades de rosales se reparten en varios grupos, detallamos a continuación, de acuerdo con su vegetación y el efecto decorativo de sus
flores.
Decoración del
jardín con rosales
Todos los rosales de una misma variedad tienen una idéntica vegetación. Por ello para obtener un buen efecto decorativo, conviene utilizar la misma variedad en los mazizos.
Se entiende por un rosal arbustivo cuando el mismo es igual de alto que de ancho y por rosal erguido cuando, es más alto que ancho. La altura, el vigor, la forma del rosal, el
color e incluso el perfume de las rosas dependen, principalmente, para cada variedad de su patrimonio hereditario, pero pueden variar más o menos de acuerdo con la
naturaleza del suelo, el clima, los cuidados aportados...
La poda de los rosales
Es indispensable para favorecer la mejor floración y conservar una buena y equilibrada vegetación. Esta poda debe hacerse antes de la entrada en, vegetación, o sea en los meses de junio, julio, agosto en las regiones calidas.
Plantación de los rosales
Es una operación importantísima. de la que dependerá durante muchos años la buena vegetación del rosal y la calidad de su floración.
1. ¿Cuándo se plantan los rosales? Desde finales de octubre a finales de abril, exceptuando los días en que la tierra esté
helada.
2. ¿Dónde pueden plantarse?
Exposición aireada y muy soleada. Hay que evitar totalmente situación sombreada o exposición Norte. Tierra sana, profunda y bien drenada. Admite cualquier suelo a excepción de los demasiado calizos.
3. ¿Cómo preparar la tierra? Cavar un hoyo de 50 x 60 cm., unas 6 semanas antes de la plantación, e incorporar estiércol descompuesto o algún abono comercial adecuado en las dosis que requiere el fabricante. Es importante enterrar el estiércol o abono por debajo de los 40 cm. con el fin de no quemar las raíces. Aquel terreno en el que haya habido plantado
árboles, arbustos o rosales, es indispensable remover y cambiar la tierra en una profundidad de 40 cm… eliminando la capa superior (unos 20 cm) y añadiendo una buena tierra de jardín. Si no es posible encontrar una buena tierra, puede desinfectarse la anterior con algún producto adecuado. La tierra debe desinfectarse en septiembre, octubre si la plantación se realiza en marzo.
Plantación de un rosal de jardín
•Separar en dos montones la tierra extraída, la A correspondiente a la mas superficial se mezclará con abono y se colocará después en la base del hoyo, la B correspondiente a la mas profunda, se mantendrá sin abono y será la que se colocará en la parte superior del hoyo.
•Para mantener en un buen estado el rosal cuando va atranscurrir cierto tiempo hasta su plantación, colocarlo en esta posición en un pequeño hoyo cubriéndolo totalmente de tierra. Antes de cubrir las ramas, regar.
•Colocación del rosal en el hoyo. El injerto a la altura de la superficie. La tierra A, o sea con abono no debe tocar directamente las raíces.
•Cubrir luego con la tierra B dejando la de la parte superior en forma de pequeña taza.
•Regar, llenando la taza dejada con
agua. Quizás hasta 3 0 4 litros de agua serán necesarios.
•Tras dejar escurrir el agua amontonar un poco de tierra para proteger el rosal.