Mi intención, después de pasar un
verano en el
pueblo, era ir a trabajar, ahorrar y comprarle una
casa a mis abuelos, que la utilizan como
pajar.
Al final, como casi todos mis planes, me falló, y me falté a mi mismo.
Me arrepiento de no haberlo hecho, pues tenía varios proyectos para el pueblo, que seguro me los hubiesen permitido realizar.
Pero, mi constancia, persigue, y tengo pensado hacerlo realidad algun día.
Selene, también te escribí, soy
Cristo.
Haber si cambian al alcalde y se buscan
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