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Cansado y acalorado, tras una larga caminata, busqué la Fuente del Tejo, esperando reponerme con la fresca sombra del tejo y tomar unos tragos del agua cristalina de su fuente. Ambas cosas, la sombra del tejo y las aguas de su fuente me salvaron, años ha, de un desvanecimiento por fuerte golpe de calor.
Sólo encontré un informe tocón del veterano tronco del álbol y un inmundolodazal. ¡Malaya el autor o autores de tal desaguisado! Merecerían ser juzgaados por delito ecológico por hacer o consentir hacer desaparecer un símbolo tan emblemático del pueblo, que ha dado origen a la denominación toponímica del lugar--El Tejo--, y a una fuente cuya existencia y localización está recogida tento en los mapas del Instituto Geográfico Nacional como en la cartografía militar.
Fracasado en mmi intento, recordé que en las cercanías mi primo Eusebio se había construido un chalecito con piscina y jardín y a él me dirigi esperando encontrar el frescor y descanso buscados. Ni por asomo me figuraba encontrar un porche tan acogedor y de tan buen gusto. Allí consumí mis parcas provisiones y dormí una siesta reparadora tendido en el banco. Ana Belén, sabía del buen hacer de tu padre, pero no sospechaba que fuera tan artista. Si nos vemos este verano te enseñaré algunas otras fotos, que por no abusar no introduzco aquí. L'amí.
Sólo encontré un informe tocón del veterano tronco del álbol y un inmundolodazal. ¡Malaya el autor o autores de tal desaguisado! Merecerían ser juzgaados por delito ecológico por hacer o consentir hacer desaparecer un símbolo tan emblemático del pueblo, que ha dado origen a la denominación toponímica del lugar--El Tejo--, y a una fuente cuya existencia y localización está recogida tento en los mapas del Instituto Geográfico Nacional como en la cartografía militar.
Fracasado en mmi intento, recordé que en las cercanías mi primo Eusebio se había construido un chalecito con piscina y jardín y a él me dirigi esperando encontrar el frescor y descanso buscados. Ni por asomo me figuraba encontrar un porche tan acogedor y de tan buen gusto. Allí consumí mis parcas provisiones y dormí una siesta reparadora tendido en el banco. Ana Belén, sabía del buen hacer de tu padre, pero no sospechaba que fuera tan artista. Si nos vemos este verano te enseñaré algunas otras fotos, que por no abusar no introduzco aquí. L'amí.