Manolo, la foto parece de película. El fotógrafo tenía buena herramienta, pero tu padre tampoco se quedó atrás. Hoy sería envidiado si se pasease por las calles del pueblo. Todo un clásico. Nunca supe que había sido taxista.
Manolo, Ana y demás, otro año sin vernos. Dice el refrán: que la cuenta del pobre que nunca se logre. Espero que lo hayais pasado bién. Haber si el próximo año nos podemos encontrar, de todas formas ya queda menos. Un abrazo.
Manolo, Ana y demás, otro año sin vernos. Dice el refrán: que la cuenta del pobre que nunca se logre. Espero que lo hayais pasado bién. Haber si el próximo año nos podemos encontrar, de todas formas ya queda menos. Un abrazo.