Yo los calboches los sigo haciendo, pero sólo se le parecen en el nombre. Ni la manera de hacerlos ni el sabor se le asemeja. Total, que como el calbochero colgado de las llares y sus brasas debajo, nada. Os envidio a quienes lo podeis seguir haciendo en su manera tradicional. Yo, con una sartén agujereada. Esos sí que són recuerdos para volver a vivirlos.
Monumento a Lorenzo Santamaría, Camilo Sesto y algún que otro Italiano. Saludos.