Hubo aquí, por años 30, tres altísimos álamos de la especie Populus Nigra (Álamo Nedro), también conocido como álamo lombardo. Se caracteriza la especie por el abundante ramaje que de trecho en trecho le nace, abrazando estrechamente el tronco.
Me ha venido a la mente, viendo la foto, mi temprano recuerdo (tenía yo cinco años), de una rumbosa boda celebrada justo el 8 de junio de 1932, que se apartó no poco del ceremonial corriente que tan acertadamente explica Marcial en su libro "Apuntes para una Historia de Serradilla del Llano".
Como por aquel entonces no abundaban los coches para llevar a la novia a la iglesia, engalanaron pomposamente un carro tirado por un par de caballos o símplemente rozagantes mulos, y todos los invitados se proveyeron de airosas varas de los citados álamos para formar la comitiva, con la tradicional música de tamboril y gaita, cantos y griterio, desde la plaza de la Estapia, calle Larga arriba, tramo de la carretera frente a la plaza, lateral de la casa de tío Silverio e Iglesia.
Supongo que el sonido de la música y el golgorio de los acompañantes me hizo salir corriendo demi casa (en el solar que hoy ocupa El Pasil) y plantarme a saltos en el inicio de la curva de la carretera, frente a la entonces casa de tía Sinda, hoy bar de Nacho.
¿De qué boda se trataba? Pues la de Beatriz, hija de tío Enrique, y de Sebastián Sevillano. Como tío Enrique era tratante de animales de tiro y carga, generalmente mulos, y alguna más rara vez caballos, de aquí mi duda de si el carro iba tirado por mulos o por caballos adquiridos para la ocasión.
Me ha venido a la mente, viendo la foto, mi temprano recuerdo (tenía yo cinco años), de una rumbosa boda celebrada justo el 8 de junio de 1932, que se apartó no poco del ceremonial corriente que tan acertadamente explica Marcial en su libro "Apuntes para una Historia de Serradilla del Llano".
Como por aquel entonces no abundaban los coches para llevar a la novia a la iglesia, engalanaron pomposamente un carro tirado por un par de caballos o símplemente rozagantes mulos, y todos los invitados se proveyeron de airosas varas de los citados álamos para formar la comitiva, con la tradicional música de tamboril y gaita, cantos y griterio, desde la plaza de la Estapia, calle Larga arriba, tramo de la carretera frente a la plaza, lateral de la casa de tío Silverio e Iglesia.
Supongo que el sonido de la música y el golgorio de los acompañantes me hizo salir corriendo demi casa (en el solar que hoy ocupa El Pasil) y plantarme a saltos en el inicio de la curva de la carretera, frente a la entonces casa de tía Sinda, hoy bar de Nacho.
¿De qué boda se trataba? Pues la de Beatriz, hija de tío Enrique, y de Sebastián Sevillano. Como tío Enrique era tratante de animales de tiro y carga, generalmente mulos, y alguna más rara vez caballos, de aquí mi duda de si el carro iba tirado por mulos o por caballos adquiridos para la ocasión.
Puedo decir y me siento muy orgullosa de ello, que soy una de las nietas de Beatriz y Sebastián.
El leer este mensaje me a traído unos recuerdo inolvidables de mi tierra, pues aunque me fui muy pequeña, mi madre me llevo a nacer allí.
Agradezco de todo corazón a mi prima que vive allí que me allá llamado, para poderlo compartir conmigo. Y muchas gracias por escribirlo. Es una casualidad pero yo me case el 8 de junio de 1991.
El leer este mensaje me a traído unos recuerdo inolvidables de mi tierra, pues aunque me fui muy pequeña, mi madre me llevo a nacer allí.
Agradezco de todo corazón a mi prima que vive allí que me allá llamado, para poderlo compartir conmigo. Y muchas gracias por escribirlo. Es una casualidad pero yo me case el 8 de junio de 1991.