La vida es cambio. Por otra parte, la soledad siempre se acota a un contexto de compañía, al menos, esto es lo positivo por una cuestión de higiene mental. Es esencial tener espacios de pertenencia y de encuentro con los demás.
Lo único que realmente importa es sentir y vivir lo que uno cree, siempre que sea algo más que una simple creencia en el propio bienestar.