Cada persona, un mundo.
Cada persona, una etapa.
Cada persona, un corazón.
Cada persona, una etapa.
Cada persona, un corazón.
Nuestra forma de ver el mundo nos condiciona. La realidad que vemos a través de los ojos es una realidad creada por nuestros pensamientos, nuestra actitud para con el mundo.
Los pensamientos crean nuestra realidad. Elígelos bien.
Los pensamientos crean nuestra realidad. Elígelos bien.