En un concurso televisivo
Dígame, señora, por 50.000 ptas. ¿Quién fue el primer hombre?
Eso no se lo digo yo, ¡ni por un millón de ptas!
Dígame, señora, por 50.000 ptas. ¿Quién fue el primer hombre?
Eso no se lo digo yo, ¡ni por un millón de ptas!
Donde andas mi alma,