EL
CRISTO DEL HUMILLADERO DE VILLALBA DE LOS LANOS
Realizada sobre el siglo XVI, procedente de los talleres castellanos. Si parto de la base que la
Iglesia de la Asunción data del siglo XV por deseo expreso de los señores Enríquez y María de Monroy, conocida por La Brava, apuesto a que es de la época de las tallas de Juan de Juni y su lateral me infunde las penumbras de Juan de Herrera.
Si me remonto al significado de humilladero es lugar devoto situado en las entradas de los
pueblos, donde había alguna imagen o
cruz. Cuenta la leyenda urbana que su existencia era para que los transeúntes pidieran protección divina antes de iniciar los viajes o al regreso de los mismos.
Sea como fuere el Cristo del Humilladero de
Villalba de los Llanos está plasmado con la viva, dolorosa y realísima expresión de Nuestro Señor, injuriado, maltratado por la turba, en redención del Mundo.
Si contemplamos nuestro Cristo del Humilladero, pese al tiempo y al mal estado de la pintura, parece recién crucificado: la boca abierta, su lengua pegada al paladar seca del dolor y del martirio horrible de su crucifixión; sus manos sangrantes cual si estuviera recién clavado en el madero; mi vista observa la lanzada de Longinos entre su quinta costilla intercostal emana su sangre que baja hasta su cintura que la va recogiendo para plasmarla en el
Santo sudario
El devoto que contemple esta talla y su pintura ve un Cristo doliente, como si estuviera recién inmolado. Mi vista se clava perpleja en la
Virgen María y en María Magdalena, asumiendo con dignidad el dolor y muerte, acompañando en el trance final a su hijo.
En otro apartado invisible, pero no menos bíblico, me imagino a María de Cleofás, a Salomé, a Marta…esperando su última palabra “«Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu, mi alma y mi cuerpo», sin olvidarnos su primera palabra: "Padre, perdónalos, que no saben lo que hacen” El
cielo se desgarró y llegó José de Arimatea y Nicodemo, para bajarlo de la cruz y cerrar este horrible acto.
Es una pena que los óleos no se hayan recuperados en su tiempo. Para los estudioso de pinturas y tallas pienso que puede ser un Cristo interesante, algunos han pasado por la Iglesia de Villalba de los LLanos para verlo y fotografiarlo.
RODRÍGUEZ PEÑA