BALISA: SAN SEBASTÍAN...

SAN SEBASTÍAN

¿Quién habla de martirio hoy en tu presencia?
¿Acaso la conciencia te dicte la ayuda todavía?
Tal vez sigas viendo como ayer
el encendido resplandor del mayor sol
que te dejó ebrio de luz
y pletórico por siempre de ella,
quedaste convencido.

No te importó el helado temblor del dardo
ni te asustó el arquero cuando te apuntó.
Tu brazo soldado al árbol
y tu mirada perdida en la lejanía
en busca de piedad, huía de lo oscuro
y silencioso.

No palpabas el sudor frío
ni fuiste consciente del llanto ni el miedo.
Sabías si, que te disparaban dardos
pero sólo veías ternura, llama implacable
de vaso perfumado.

Lo que antes fue luz, temblor esperado,
hoy es quietud en el camino del olvido
con olor a humo bajo el parpadeo de las velas.

Ya se ha borrado el recuerdo,
no hay sensibilidad en el
vacío póstumo de los hombres
mientras permaneces en el
silencio absoluto del día
y oscuro de la noche
agotando los días infinitos.