Nos proponemos acompañar a Antonio Machado en sus caminatas por la ciudad del Acueducto. Con Machado iremos siempre donde sea menester, ¡faltaría más!, y estaremos dispuestos a transigir con los tópicos al uso… pero, para no ocultar nada al fiel lector, vaya por delante que eso del paseo como inspirador de la poesía y actividad favorita de sus artífices nos parece una exageración poco fundamentada, amén de cursi. Cierto es, en el caso que nos ocupa, que el propio interesado abonaba el equívoco:
En Segovia una tarde de paseo
por la alameda que el Eresma baña…
poema El milagro (De un Cancionero Apócrifo)
En Segovia una tarde de paseo
por la alameda que el Eresma baña…
poema El milagro (De un Cancionero Apócrifo)