Santuario de Nuestra Señora de Hornuez.
Moral de Hornuez recibió el titulo de villa en época del reinado de Carlos III. Hasta comienzos del siglo XX el pueblo tan solo era nombrado como Moral, añadiéndosele posteriormente el calificativo 'de Hornuez', al haber pertenecido este lugar - hoy despoblado - a su término, y de cuyo recuerdo solo queda la ermita de Nuestra Señora de Hornuez.
La iglesia parroquial de Moral se dedica a san Cristóbal, y se ve que en su época reemplazó a otra románica que allí había, pues algunos de sus canecillos pueden todavía verse en la cornisa del muro norte del pórtico de ingreso al templo. Su planta se reparte en tres naves, que se cubren con bóvedas de arista. Dentro del templo se puede admirar un buen retablo mayor barroco donde se entroniza el santo titular de la parroquia, y otro neoclásico. A todo esto se une una buena cruz procesional obra del platero Antonio de Oquendo.
Enebral o sabinar de Hornuez.
También dentro del casco urbano del pueblo podemos ver la conocida como casa del Obispado y en sus alrededores unos buenos ejemplos de palomares tradicionales, así como visitar la fragua museo del pueblo.
A medio camino entre Moral de Hornuez y Valdevacas, se localiza el ya mentado santuario de Nuestra Señora de Hornúez, donde se acoge la imagen de la Virgen de Hornúez, nombrada a finales del siglo XVII, abogada y patrona de la Villa y Tierra de Maderuelo, época en la que también se edificaría el templo que hoy allí la acoge, aunque la tradición asegura que la imagen se apareció en época medieval (s.XIII) a unos pastores sobre el tronco de un enebro o sabina. Con esta ermita tienen varias villas de contorno contraído voto de villa. De este autóctono árbol 'la sabina' podemos ver unos buenos ejemplares milenarios repartidos de forma adehesada por los alrededores de la ermita, conformando el conocido espacio natural del Enebral o Sabinar de Hornuez.
Moral de Hornuez recibió el titulo de villa en época del reinado de Carlos III. Hasta comienzos del siglo XX el pueblo tan solo era nombrado como Moral, añadiéndosele posteriormente el calificativo 'de Hornuez', al haber pertenecido este lugar - hoy despoblado - a su término, y de cuyo recuerdo solo queda la ermita de Nuestra Señora de Hornuez.
La iglesia parroquial de Moral se dedica a san Cristóbal, y se ve que en su época reemplazó a otra románica que allí había, pues algunos de sus canecillos pueden todavía verse en la cornisa del muro norte del pórtico de ingreso al templo. Su planta se reparte en tres naves, que se cubren con bóvedas de arista. Dentro del templo se puede admirar un buen retablo mayor barroco donde se entroniza el santo titular de la parroquia, y otro neoclásico. A todo esto se une una buena cruz procesional obra del platero Antonio de Oquendo.
Enebral o sabinar de Hornuez.
También dentro del casco urbano del pueblo podemos ver la conocida como casa del Obispado y en sus alrededores unos buenos ejemplos de palomares tradicionales, así como visitar la fragua museo del pueblo.
A medio camino entre Moral de Hornuez y Valdevacas, se localiza el ya mentado santuario de Nuestra Señora de Hornúez, donde se acoge la imagen de la Virgen de Hornúez, nombrada a finales del siglo XVII, abogada y patrona de la Villa y Tierra de Maderuelo, época en la que también se edificaría el templo que hoy allí la acoge, aunque la tradición asegura que la imagen se apareció en época medieval (s.XIII) a unos pastores sobre el tronco de un enebro o sabina. Con esta ermita tienen varias villas de contorno contraído voto de villa. De este autóctono árbol 'la sabina' podemos ver unos buenos ejemplares milenarios repartidos de forma adehesada por los alrededores de la ermita, conformando el conocido espacio natural del Enebral o Sabinar de Hornuez.