Segovia comienza el s. XX anclada en el pasado, pero, afortunadamente, con un buen sustrato cultural que atraía a los amantes del Arte: Zuloaga, la Universidad Popular fundada por Antonio Machado, un Instituto de Segunda Enseñanza...
El 12 de julio de 1941 se declaran monumentos nacionales algunos edificios de la ciudad.
A partir de 1950, comienzan las numerosas obras públicas que convierten a Segovia en lo que hoy vemos.
El 4 de noviembre de 1982, el Papa Juan Pablo II hizo una visita a Segovia. Se celebró la Palabra entre una multitud en la Plaza de Artillería, junto al Acueducto, y luego bajó en Papamóvil al Santuario de la Fuencisla y la iglesia del Carmen donde vio el cuerpo incorrupto de San Juan de la Cruz (Karol Wojtyla hizo su tesis doctoral sobre San Juan de la Cruz).
El 4 de diciembre de 1985, la UNESCO declara el Casco Antiguo y el Acueducto de Segovia Patrimonio de la Humanidad.
En la década de los 90, también se han realizado numerosas reformas, que aún continúan, para mejorar la ciudad de cara al turismo, fuente principal de nuestra economía.
Aunque la principal ocupación de los últimos años ha sido el Acueducto: se cortó la circulación de tráfico bajo sus arcos, se le tapó con andamios varias veces, se limpió; y aún continúa andamiaje en algunos trazos...
Ahora se está discutiendo sobre una autopista, que los segovianos queremos que sea autovía sin peaje, que conecte Segovia y San Rafael y enlazar con la Nacional 6 que va a Madrid (o La Coruña, claro)... ; también se está tratando que el tren veloz que va a unir Madrid y Valladolid tenga una parada en Segovia...
Uno de los últimos acontecimientos que conmocionaron a toda la ciudad ocurrió el 22 de diciembre de 2000, día en el que una bola con el número 49740 salió de un gran bombo (que contenía 66000 números más) a la vez que otra bola (que salió de otro bombo más pequeño): la bola del Gordo de Navidad de ese año. Este suceso dejó caer sobre Segovia 46500 millones de pesetas. Desgraciadamente, ese mismo día, casi a la misma hora, asesinaron a Cristina Gala, lo que oscureció un poco la fiesta. Segovia es una ciudad tranquila y ese día se dieron lugar dos hechos que alteraron la ciudad, tanto por el lado bueno como por el malo.
El 12 de julio de 1941 se declaran monumentos nacionales algunos edificios de la ciudad.
A partir de 1950, comienzan las numerosas obras públicas que convierten a Segovia en lo que hoy vemos.
El 4 de noviembre de 1982, el Papa Juan Pablo II hizo una visita a Segovia. Se celebró la Palabra entre una multitud en la Plaza de Artillería, junto al Acueducto, y luego bajó en Papamóvil al Santuario de la Fuencisla y la iglesia del Carmen donde vio el cuerpo incorrupto de San Juan de la Cruz (Karol Wojtyla hizo su tesis doctoral sobre San Juan de la Cruz).
El 4 de diciembre de 1985, la UNESCO declara el Casco Antiguo y el Acueducto de Segovia Patrimonio de la Humanidad.
En la década de los 90, también se han realizado numerosas reformas, que aún continúan, para mejorar la ciudad de cara al turismo, fuente principal de nuestra economía.
Aunque la principal ocupación de los últimos años ha sido el Acueducto: se cortó la circulación de tráfico bajo sus arcos, se le tapó con andamios varias veces, se limpió; y aún continúa andamiaje en algunos trazos...
Ahora se está discutiendo sobre una autopista, que los segovianos queremos que sea autovía sin peaje, que conecte Segovia y San Rafael y enlazar con la Nacional 6 que va a Madrid (o La Coruña, claro)... ; también se está tratando que el tren veloz que va a unir Madrid y Valladolid tenga una parada en Segovia...
Uno de los últimos acontecimientos que conmocionaron a toda la ciudad ocurrió el 22 de diciembre de 2000, día en el que una bola con el número 49740 salió de un gran bombo (que contenía 66000 números más) a la vez que otra bola (que salió de otro bombo más pequeño): la bola del Gordo de Navidad de ese año. Este suceso dejó caer sobre Segovia 46500 millones de pesetas. Desgraciadamente, ese mismo día, casi a la misma hora, asesinaron a Cristina Gala, lo que oscureció un poco la fiesta. Segovia es una ciudad tranquila y ese día se dieron lugar dos hechos que alteraron la ciudad, tanto por el lado bueno como por el malo.