REVENGA: * La construcción del bar o chiringuito fue una decisión...

* La construcción del bar o chiringuito fue una decisión exclusiva de esta Junta Vecinal. Hemos necesitado de dos años para poderlo pagar, pero ahí está. Y, a estas alturas, creo que nadie podrá decir que no ha contribuido de forma decisiva ha hacer agradable la estancia en la piscina y prolongarlo tras su horario de cierre. La gestión de Juan, el año pasado, muy buena, innegablemente. Sus propias circunstancias, al estar fundamentalmente centrado en el bar Soto, han impedido este año llegar a un acuerdo, que hubiéramos deseado. Finalmente, el bar lo lleva la misma empresa que gestiona la piscina, algo muy interesante desde el punto de vista de la coordinación de todos los servicios. SIMA, que llevó la piscina los años anteriores, nunca quiso el bar. ESAN, la empresa de este año, tampoco optó en un principio, pero tras una negociación con todos los que, en una segunda vuelta, mostraron algún interés, es la que ha presentado mejor oferta tanto en lo que nos aporta (500 €) como en los servicios que ofrece.
De hecho, hubo que decidir entre ESAN y dos chicos del pueblo que también mostraron interés. Exactamente las mismas razones que apunta Juan en una de sus últimas intervenciones estuvieron sopesándose. Y aunque las circunstancias de mejor oferta, mucha mayor disponibilidad de medios (llevan varias piscinas y pabellones deportivos en toda España, entre ellos el club Canoé, de Madrid) favorecían a ESAN, la posibilidad de que alguien del pueblo lo llevase era muy a tener en cuenta. Pero lo que definitivamente inclinó la balanza fue que, por primera vez, la gestión de la piscina y el chiringuito iba a ser llevado por las mismas personas. Es lo que siempre hemos querido, imposible en los años que lo gestionó SIMA. Y es lo que se hace en todos los pueblos de los que hemos requerido información. De hecho, todos pagan porque alguien gestione la piscina, excepto aquellos, como Valverde del Majano, en los que el bar tiene categoría de restaurante, funciona todo el año y pueden albergar hasta 200 personas en celebraciones. Dicho de otro modo, si el bar es algo que merece la pena están garantizadas las ganancias para el Ayuntamiento y la empresa soporta, aunque pierda, los gastos de gestión de la piscina. Algo así, por ahora, aquí es inviable, pero también lo parecía que la piscina volviera a funcionar y que se le dotara de bar. Todo es cuestión de tiempo e imaginación, que no dudamos les sobrará a los miembros de la próxima Junta Vecinal.
Cualquier labor de gestión, en este caso la Alcaldía de Revenga, implica tomar decisiones. No siempre es fácil. Pero hay momentos en los que hay que decidir con los elementos y datos disponibles, aún sabiendo que la decisión no va a ser compartida por todos. Insisto en algo que ya he repetido varias veces: las decisiones las apoyamos unánimemente todos los miembros de la Junta Vecinal, con independencia del color político de cada cual. Por supuesto, esto no garantiza que no nos podamos equivocar. Pero actuamos honradamente y sin ninguna ocultación. Quienes estén en la próxima Junta Vecinal tendrán ocasión de comprobar hasta qué punto son ciertas estas reflexiones.
Sólo nos falta que la piscina empiece a funcionar esta temporada. La labor inspectora de las funcionarias de Sanidad es tremendamente escrupulosa y severa (también tendrán ocasión de comprobarlo los próximos) y detalles, para nosotros muy nimios, como es la falta de las especificaciones técnicas y normas de uso de los productos químicos utilizados, han impedido que se abriera el día 26, como pretendíamos. Aunque toda esta documentación obraba en nuestro poder a los diez minutos de haberse ido, el día 25, y 20 minutos después estaba en Sanidad. Pero ellas cumplen su función y nosotros tenemos obligación de responder a sus requerimientos y subsanar todas las deficiencias que observen. Hemos aprovechado para realizar ya algunas reparaciones que estaban previstas para más adelante, como son la sustitución de cristales rotos por actuaciones vandálicas y la renovación de los portarrollos del papel higiénico, que hemos cambiado por otros de material plástico para eliminar cualquier peligro de cortes. Esperamos que a lo largo de esta semana nos den el visto bueno definitivo.