REVENGA: Al abrir esta página web leemos que es un proyecto...

Al abrir esta página web leemos que es un proyecto de colaboración que pretende crear un gran archivo de información sobre la cultura de nuestros pueblos, tradiciones rurales, historia que los define, fotografías para el recuerdo. Pero en el caso de Revenga se ha ido desviando cada vez más de esa bella declaración de intenciones y se ha convertido en un foro en el que una serie de personas, según ellos creen anónimas, me insultan y amenazan, en razón del cargo electo que desempeño. No le he dado hasta ahora excesiva importancia, pero estamos en un punto en el que las consecuencias pueden agravarse y producirse hechos irreversibles. Por eso, antes de que sea tarde e incluso no pueda utilizar este medio como consecuencia de alguna agresión, he decidido denunciar los hechos para que, desde el punto de vista de la Justicia, se les dé el tratamiento que corresponda.
Me he visto obligado a analizar todas las intervenciones desde el principio. No lo había hecho antes. Y he comprobado que, al tiempo que Juan García anuncia que han desaparecido todas las intervenciones de Don carnal, todos los mensajes anteriores atribuidos al pseudónimo “lolo” cambian de autor, y desde entonces son de Juan García. Mucho antes de que decidiera salir del anonimato. ¿Acaso este foro tiene vida propia. Repito algo que ya dije: sólo Pueblos de España puede realizar estas alteraciones. Pero, ¿a instancias de quién?.
Desde la primera intervención de Zpepito, 14/05/2010, 16:22 en su texto se aprecian, además de insultos directos hacia mí y hacia mi madre, fallecida en 1988, unas claras intenciones de demostrar que Don carnal y yo somos la misma persona. Continúa en esa línea y aumentan sus ataques en el mensaje de 28/05/2010, 19:50, que titula Ad. Lorenzo Cañas “Rucio”, en el que da unas informaciones personales que prácticamente me aseguran de quien se trata, aunque ya lo sospechaba. Continúan y aumentan sus insultos en todas las intervenciones que ha tenido desde entonces, y “llama” a su clac para que me desenmascaren. Y sacan unas conclusiones sobre mi estado de ánimo y mi aspecto físico que podrían ser hilarantes, pero que constituyen un claro delito de amenazas, insultos a autoridad pública y acoso, sobre los que la Justicia se pronunciará en su momento.
El 11/06/2010, 16:24, inicio una serie de mensajes, que pretendo continuar durante bastante tiempo, para informar muy detalladamente de cómo se trabaja en la Alcaldía y en la Junta Vecinal, con vistas a ilustrar a los que, el próximo año, piensen presentarse en las elecciones municipales. Para que sigan esta línea, si lo creen útil y positivo, o para que hagan lo contrario. Estos mensajes llevan títulos relacionados con el menú Inicio de Windows XP o con ventanas de Google, más o menos coherentes con el contenido del mensaje. Pero para estas personas pseudoanónimas, afectadas sin duda por serios problemas de identidad familiar y traumas de la infancia no resueltos (se avergüenzan del nombre que sus padres les pusieron y de los apellidos que de ellos han heredado) son estratagemas para desviar la atención. El pueblo y lo que en él pasa y se hace no les interesa nada. Su obsesión actual es buscarme la correspondencia con Don carnal.
Curiosamente, esta línea es seguida, además de por los anónimos, por alguien que optó por identificarse (tan bien lo hizo que ha tenido efectos retroactivos). Si leemos con detalle los mensajes de Juan García, unas veces de manera subliminal y otras de modo más claro, con amenazas incluidas, aviva el fuego de los que desearían esa equivalencia José Luis Cañas = Don carnal. Su última alusión, muy literaria, por cierto (Dr. Jekyll y Mr. Hyde), así lo confirma.
Lo que son las cosas, ahora yo también tengo interés en que se carguen nuevamente los mensajes de Don carnal y que se sepa quién es. Pero no hay que tener prisa, se sabrá, al igual que todo lo concerniente al resto de foreros. Solemos decir que la Justicia es lenta, pero es inexorable. En todo caso, sorprende la irrupción de un personaje aparentemente a mi favor, que en muy poco tiempo pasa de presumir de su cultura literaria (especialmente cervantina) a soliviantar a los que no necesitan ningún pretexto para pasar de las agresiones verbales a las físicas. Puede que sea yo ahora el que tiene un pensamiento enrevesado, pero las coincidencias cronológicas de desaparición de unos mensajes y cambio de nombre de otros y las insinuaciones puntuales de Juan García, proclamado líder de este grupo por sus seguidores, respecto a la doble cara, son muy sospechosas. Está claro que teniendo amigos así me sobran todos los enemigos. ¿Tendrán que ver algo Cervantes y Stevenson con este desdoblamiento de personalidad?
Ya le dije a Antonio que es muy fácil conocerme. En esa línea digo a todos: NUNCA MIENTO. ¿Por qué? También lo dije. Porque siempre lo he hecho así, me ha ido muy bien y no voy a cambiar. Eso sí, no tengo por qué manifestar ninguna verdad de forma impulsiva. Estas cosas deben meditarse y manifestarlas en el momento oportuno. Pero nunca sustituirlas por otras que no son ciertas. La doble cara, la doble personalidad, me repugna. Lo digo claramente: NO SOY DON CARNAL. No tengo datos, por ahora, para formular ninguna hipótesis. Posiblemente, para resolver este enigma, haya que profundizar en lo que aventuro en el párrafo anterior. O no. Que trabaje la Justicia.