REVENGA: “Esta programación de actividades festivas es el resultado...

“Esta programación de actividades festivas es el resultado de la colaboración de diversas personas, colectivos e instituciones: Junta Vecinal de Revenga, Ayuntamiento de Segovia, Asociación de Vecinos, AMPA, Peñas, Comerciantes de Revenga y vecinos particulares.
En ella ha intervenido mucha gente, deseosa de que todos disfruten. Ojalá se recupere aquella armonía y colaboración vecinal que tuvimos muchos años y que nunca debió perderse.
Como aún falta tiempo para los días centrales de las fiestas, el programa sigue abierto para todos los que deseen complementarlo con actividades ahora no previstas y estén dispuestos a prestar su colaboración personal para llevarlas a la práctica. Deben ponerse en contacto con el Alcalde o cualquier otro miembro de la Junta Vecinal, para estudiar su viabilidad y encajarlas en los huecos que haya. Se harán públicas en las hojas de ampliación diarias”.

Así es el contenido de la hoja que he buzoneado junto con la programación de fiestas. Ambos documentos obran en poder de todos los vecinos, por lo menos un juego por vivienda. También de los que dicen que a algunos no se repartirá (aunque ya lo tengan en el momento que escriben tal cosa en este foro). También de los que no tienen buzón, a pesar de que lo que lleva insistiendo al respecto el servicio de Correos. También de los que viven en Revenga desde hace muchos años y siguen sin empadronarse (he comprobado que hay 330 viviendas ocupadas de forma permanente o temporal, lo que no cuadra con los cerca de 600 empadronados que hay solamente). También de los que critican su contenido y me insultan por ello antes de conocerlo. También de los que fueron causa directa de que las fiestas, tal como antes se conocían, desaparecieran, y, desvergonzadamente, pretenden eludir su responsabilidad culpándome a mí por ello. También de los que dicen que no han abierto aún el buzón, aunque algunos vieron cómo lo hacían y cogían estos papeles.

Pero todo el trabajo que esto ha supuesto tiene una gran recompensa. La de comprobar la alegría de la inmensa mayoría de los vecinos, felicitándome por haber conseguido salvar esos días. La de poner en evidencia la desvergüenza de quienes critican e insultan, en vez de unir a los que quieren trabajar por el pueblo, como hemos hecho desde la Junta Vecinal (claro, ellos no pueden, porque no encuentran ayuda; son un reducido grupo endogámico, que se creen sus propias mentiras y que confunden los apoyos que aparentemente algunos les dan, originados por el miedo que infunden sus amenazas, con una real toma de partido por ellos).

Son incapaces de colaborar a favor del pueblo, siguiendo la sugerencia del último párrafo que reproduzco al principio. Se sienten felices cuando consiguen hacer daño. Hecho significativo: chicos y chicas de las peñas, con pensamientos muy diferentes, de modo unánime, me han aconsejado que, por nada del mundo, me haga responsable de una charanga que acompañase la inauguración de las fiestas el día 12. Si hay que pagar algo, no ponen objeción, pero responsabilizarse alguien, bajo ningún concepto. Están marcados por algún antecedente que supuso daños intencionados a instrumentos o equipos de los músicos. Daños promovidos por los que, con la “gestión” de la Peña Revenga y de la Asociación de Vecinos de todos conocida y a la que hace poco hice referencia, consiguieron sembrar entre los vecinos un ambiente de desconfianza que pudo suponer la desaparición de las fiestas. Ese era su deseo: su poder lo basan en el caos, la desunión, la amenaza y el insulto: basta con leer los contenidos de sus últimos mensajes.
Pero les va muy mal. Hemos demostrado que la gente se une, a pesar de sus presiones. Que el pueblo entiende que para recuperar las fiestas tienen que colaborar personalmente, cuantos más mejor. Que las cosas salgan bien y que la gente disfrute dependen de las propias personas que lo quieren, algo contra lo que no pueden ni las amenazas ni los vaticinios de profetas de mal agüero. Y puestos a profetizar, digo que vamos a disfrutar, con lo que hay previsto y con lo que los vecinos de buena voluntad aporten en estos días. Y que, probablemente, las fiestas de 2011 sean una manifestación abrumadoramente masiva de unión vecinal. No importa que en la Junta Vecinal estén otras personas, ni que el signo político municipal pueda cambiar. Es muy probable que, de una vez, los vecinos de Revenga desenmascaren públicamente a estos personajes y los condenen al olvido, al desprecio y al ostracismo.