REVENGA: Puede que sea inevitable. No somos perfectos. Y menos...

Puede que sea inevitable. No somos perfectos. Y menos cuando el alcohol inunda la masa encefálica. Sería deseable que nada de esto hubiera pasado:

- Rotura de varios palos del cerramiento del parque.
- Inutilización de todos los aspersores del parque, impidiendo el riego del césped.
- Daños en aparatos de áreas de juegos infantiles, especialmente en la escuela.
- Rotura de un árbol en la plaza, e intento de sacar el banco contiguo.

De alguno de estos hechos el propio autor lo ha confesado y lo reparará cuando llegue el momento. Una muestra de hombría por su parte. Pero los autores de los demás destrozos están en el anonimato. Pueden ser de aquí, o no. Pero seguro que quienes les acompañaron al parque lo saben. Incluso, algún vecino de la zona les puede haber visto.

Insisto: no somos perfectos. Pero no pasa nada porque lo intentemos.