La primera
piedra se colocó en la
fachada occidental el 8 de junio de 1525 y la consagración fue el 16 de julio de 1768 por el obispo D. José Martínez Escalzo, 243 años después de la colocación de la primera piedra. Para abaratar costes se trasladaron algunos elementos de la antigua
catedral al nuevo emplazamiento: el magnífico
claustro del siglo XV diseñado por Juan Guas; el
coro, también del siglo XV, realizado en madera de
nogal con los sitiales del rey Enrique IV y su mujer Juana de
Portugal; pero también
esculturas, pinturas, rejería, la
capilla de Los
Cabrera o la
portada de acceso al claustro.