Esta es la casa donde yo nací, bien cuidada y florida y con su pozo como casi todas las casas de antes en el pueblo, en el pozo se recogía el agua del gotereo de los tejados correspondientes a la familia y casi siempre se encontraba lleno,, no se utilizaba para beber, pero si para lavar ropa y otros menesteres ya que el agua como era de lluvia se conservaba descalcificado, como lo piden ahora para las lavadoras modernas, antes actuaba sobre las manos de las señoras y las mozas que hacían estas labores, con ello siempre se lavaban la cabeza y menudos pelos tan lindos tenían. JAB