Seguramente cada persona tiene un lugar especial, que no tiene por qué tener una forma, un color o una atmósfera determinada. Es especial, sencillamente porque es en ese emplazamiento donde se conjugan los sentimientos más profundos.
Pasan los años y aumentan las circunstancias, pero Tejares sigue siendo un espacio mágico de mi vida. Allí aprendí a jugar a las cartas con el Señor Ignacio (que.E.P.de), allí comprendí para qué valía el cemento gracias al Señor Blas, allí disfruté con mi primo y mis tíos, allí me enamoré...en fin que Tejares forma parte incuestionable de mi existencia.
Allí confirmé que mi tía, la verdadera Rosa de España, y mi abuela, socorriendo siempre a todo el mundo son el mejor ejemplo de la intrahistoria que tanto alababa Unamuno y que tanto bien han hecho por este país, por su gente y por ende, por mí.
Se os quiere a todos.
Pasan los años y aumentan las circunstancias, pero Tejares sigue siendo un espacio mágico de mi vida. Allí aprendí a jugar a las cartas con el Señor Ignacio (que.E.P.de), allí comprendí para qué valía el cemento gracias al Señor Blas, allí disfruté con mi primo y mis tíos, allí me enamoré...en fin que Tejares forma parte incuestionable de mi existencia.
Allí confirmé que mi tía, la verdadera Rosa de España, y mi abuela, socorriendo siempre a todo el mundo son el mejor ejemplo de la intrahistoria que tanto alababa Unamuno y que tanto bien han hecho por este país, por su gente y por ende, por mí.
Se os quiere a todos.