Valdevacas de Montejo se encuentra en la provincia de Segovia, limitrofe con la provincia de Burgos y Soria.

En las Hoces del Rio Riaza podemos encontrar la ermita del Casuar, enclavada en un paraje de gran belleza, junto al rio Riaza flanqueado por majestuosas hoces.

Primera semana de Agosto. Se venera la imagen de la Inmaculada Concepción, por lo que en su origen las fiestas eran el 8 de diciembre. También y con motivo de un granizada que aconteció un 15 de junio, ese día es motivo de reunión, donde se conmemora el aniversario, se le llama popularmente "san 15".

Las costumbres como pueblo de buen vino y buen cordero, son asar chuletas en las bodegas con sarmiento de viña, acompañado de vino del lugar y buena compañía.

VALDEVACAS DE MONTEJO: l. con ayunt. de la prov. y dióc. de Segovia (43 leg.), part. jud. de Riaza (5), aud. terr. de Madrid (48), c. g. de Castilla la Nueva, SIT. en una regular altura; le combaten con más frecuencia los vientos E., S. y O., pues por el N. le domina un cerro denominado "El Alto" de 1140m, unos 40m más que el propio Valdevacas; el CLIMA es típico continental, con inviernos fríos y veranos calurosos y muy secos. Tiene de 30 a 36 casas, la gran mayoría de ellas rehabilitadas en los últimos años pero manteniendo fidelidad a sus orígenes; una plaza; casa del Ayuntamiento; la antigua "casa del médico" actualmente reconvertida en un consultorio donde el médico de familia acude un vez en semana, la antigua escuela de primeras letras ahora reconvertida en un albergue donde los niños de diversos colegios hacen estancias semanales para conocer la vida del campo al tiempo que una inmersión en la naturaleza y una iglesia parroquial dedicada a San Cristóbal con el cementerio está situado al norte de la Iglesia. Hasta principios de la década de 1960 los vecinos se surtían de agua de una fuente que mana todo el año llamada "La fuente del Cierzo" situada al norte del cerro de "El Alto" pero actualmente todas las viviendas y las fuentes públicas tienen agua corriente. La plaza del pueblo, con su frontón, y el bar situado en un lateral de la plaza son el punto de encuentro de habitantes y visitantes. Confina el término municipal al N. Montejo de la Vega de la Serrezuela, al E. con el desaparecido Linares del Arroyo sumergido bajo las aguas del embalse de Linares, al S. con Moral de Hornuez y al O. con Villaverde de Montejo: se extiende 1/2 leg. de N. á S. Y una distancia semejante de E. a O., y comprende extensos montes de sabinas, un gran pinar, estepas y un prado mediano usado antiguamente para el pasto común de los ganados. El terreno es de secano y de mediana calidad. Las carreteras que se dirigen a las poblaciones limítrofes son estrechas pero asfaltadas, algunas de ellas de gra belleza paisajística. La población de Aranda de Duero, situada a escasos 20 km surte de cualquier tipo de producto, pero a lo largo de la semana acuden durante todo el año diversos vendedores de fruta, pescado, pan y otros suministros. PROD.: trigo, cebada, centeno y avena; escasamente quedan un par de viñedos y mantiene pastos para ganado lanar. En sus montes se crian en libertad corzos, jabalíes, zorros, perdices y alguna que otra liebre así como una amplia presencia de rapaces. La única industria actual es la producción artesanal de miel. Tiene una población censada de unos 27 habitantes, la gran mayoría de los cuales viven todo el año pero en fiestas y durante el periodo estival la población puede superar los 300 habitantes, la mayor parte de los cuales son antiguos habitantes que emigraron a grandes núcleos urbanos o sus descendientes.

Hoces del rio Riaza, que, ademas de su gran belleza paisajistica, tenemos que mencionar a sus mas famosos habitantes, los buitres leonados. Aqui esta situado el Refugio de Rapaces.

Se han identificado aquí más de 300 especies de vertebrados, especialmente importante la colonia de aves rapaces. La poblacion de buitres leonados se estima en las casi 400 parejas pero, además, viven aquí alimoches, águilas reales, halcones peregrinos, cernícalos, águilas culebreras y calzadas, búhos reales y, en resumen, casi todas las especies de rapaces españolas. La diversidad de hábitats es también muy rica. Desde el río Riaza, con sus especies piscícolas y sus nutrias, hasta los encinares, quejigares y los interesantes sabinares, así como las zonas de páramos esteparios, donde pueden encontrarse especies raras propias de estos hábitats extremados y áridos, como es la alondra de Dupond.