Árbol de gran porte que puede alcanzar los 40 m de altura. El tronco es grueso y se caracteriza porque su parte superior adquiere un tono anaranjado, como el del salmón, al perder la parte gruesa de su corteza y dejar al descubierto la parte interna que tiene un aspecto papiráceo. Incluso desde lejos se puede advertir este carácter y distinguir un pinar de pino silvestre de otras especies. Las hojas tienen un tono azulado, salen en grupos de dos, tienen forma de acícula y miden 2-6 cm de largo. Las piñas son pequeñas, de 3-6 cm de largo, y aparecen sentadas sobre las ramillas o con un rabillo muy corto. Los piñones son diminutos y tienen un ala que facilita su dispersión una vez que la piña madura y se abre.