Desde que "Pumuki" se fue, habían pasado ya 18 meses. Ahora, ¡PON FIN!, ha vuelto y le hemos reencontrado con la misma actitud y comportamiento, que cuando se recuperó del estado lamentable con el que le vimos por primera vez: tirado en un rincón del jardin, medio degollago, y casi agonizando.
Con muchos cuidados sus heridas se curaron y se restableció totalmente.
Pasado un tiempo, desapareció. Ahora a vuelto y da continuas muestras de reconocer su refugio, su jardin, y.... sus amigos. Este Gato, sin dueño, llego a primeros de agosto, medio degollado y con las patitas heridas y peladas. Imposible saber quien o que le había producido unas heridas tan horribles.
En los primeros días, apenas si se podía mover, se pasaba el tiempo durmíendo y bebíendo leche, con enorme dificultad. Más tarde, fueron cicatrizando sus heridas, comenzo a comer, y con ello a corretear por el jardín y atender a las llamadas que le hacíamos.
Al cabo de un mes, su aspecto era el que se ve en la fotografía:...