Camino rojo que vas al cielo! cuánto te quiero!

Yo siempre te recuerdo como a una niña que obligada por las circunstancias debiste asumir tareas y responsabilidades de adulta, pero destaco que siempre prevalecían tus verdaderos años y nunca fuiste una niña-vieja, todo lo contrario siempre te ha vencido en tu dualidad tu espíritu joven, no saltaste escalones, te gustaba disfrutar de todo lo que entonces hacíamos los jóvenes. Te sigo viendo joven, una chica con una preciosa risa.
Inma, sigue alimentando a la joven que hay en ti.
Un abrazo amiga.
Feliz...
Uno de mis primeros viajes fué a Avioncillo, a pié con las amigas y con mi primera cajetilla de tabaco. Toda una aventura, allí la señora Rosa (d. e. p) me dió una rosquilla casera. Exploramos el pueblo y volvimos encantadas de la aventura. Añoro aquellos paseos largos en Blacos en el tiempo bueno.

A mí, en relación con el mensaje de ayer de Alejandro, se me pone el alma triste cuando pienso en lo lejos que me queda mi juventud.

¡Feliz Navidad!. Es tiempo de decorar y de restaurarnos. Mis...